Como he subrayado muchas veces, tener un bebé es uno de los acontecimientos más especiales en la vida de cualquier persona. Saber que a partir de ese momento ese pequeño ser pasará a ser una de las personas más importantes de tu vida te ablanda el corazón y te hace ver el mundo con otros ojos. Imaginad como nos hemos sentido nosotros, como fotógrafos profesionales al ser padres por segunda vez, con nuestra pequeña Sara, nos hace valorar aún más esos momentos previos que se viven preparándonos para ese acontecimiento. Para llegar al gran día los padres se ven forzados a pasar por diferentes etapas, cada una con sus características y sus entresijos. Los nueves meses de espera están repletos de momentos inolvidables que, desde mi punto de vista, son dignos de ser captados para la posteridad. Ver como poco a poco el pequeño va creciendo y, como, la madre feliz, aguarda su nacimiento, es una de las estampas más bonitas que como fotógrafo y, por supuesto, como padre, he presenciado.

Regálate unas fotos de embarazo diferentes

Verónica comparte conmigo ese pensamiento; la creencia de que el embarazo es una oportunidad irremplazable para realizarse un reportaje de fotos de embarazada. Por ello, no dudó un momento en acercarse al estudio para concertar una cita con nosotros. Al igual que todas las personas que vienen a hacerse un reportaje de este tipo por primera vez, Verónica tenía muchas dudas: qué tipo de ropa ponerse para una sesión de fotos de embarazo; dónde se van a realizar las fotos, en el estudio, con diferentes decorados, o en el exterior, en mitad de un enclave natural; tengo que ir sola o en compañía de mi pareja; y algunas más. Tras una pequeña charla solventamos todas sus dudas, le aconsejamos y tranquilizamos. Lo más importante es que nuestras clientas acudan a realizarse las sesiones confiadas en que se están poniendo en buenas manos.

En este caso decidimos hacer una sesión con fotografías tanto en estudio como en exteriores. Para ello nos fuimos al entorno de las Quebradas, en Torredonjimeno. A pesar de las altas temperaturas características del periodo estival, disfrutamos de unas horas viendo atardecer. Tanto Verónica como su pareja estaban encantados, lo cual se ve reflejado en las fotografías que tomamos. Su naturalidad y sencillez hizo que tanto ellos como yo pasáramos un buen rato. Tanto fue lo que disfrutamos que decidimos extender la sesión a interiores. Por ello, Verónica se pasó por nuestro estudio donde realizamos algunas otras fotos. En esta ocasión ella eligió un vestuario más sencillo que dejaba ver sus rasgos de embarazada. Además, realizamos algunas fotos detalle de los pequeños zapatos de su futuro bebé.

Estudio fotográfico en Jaén

Queremos hablaros ahora de nuestras fotos de embarazo en nuestro estudio fotográfico en Jaén. El resultado ha sido espectacular. Hemos conseguido realizar fotografías naturales, que impactan y emocionan, que reflejan la espontaneidad de la joven pareja. Ellos confiaron plenamente en mí, por lo que pude realizarle algunas fotos diferentes, originales y creativas que les encantaron. Para ello la luz jugó un papel crucial puesto que este es uno de los principales factores para obtener imágenes diferentes. Durante estos días tan luminosos y, a la vez, calurosos, es necesario tener en cuenta que una buena fotografía no puede realizarse a cualquier hora. Para que las imágenes tengan una luz correcta debemos de aprovechar los momentos en los que el sol está bajo.

El resultado, una vez más, es asombroso. Y es que no es necesario trasladarse hasta cualquier lugar lejano para conseguir fotografías diferentes, que impacten. En este caso un parque natural se ha convertido en el paisaje idóneo para que el reportaje de embarazo de Verónica e Ismael sea muy especial. En un futuro podrán volver la vista atrás para rememorar todos los buenos momentos de la espera.